Cómo ser feliz

Me gustaría hablar de nuestra naturaleza y cómo lograr la plena felicidad, entonces es importante saber que el Karma es una ley que rige nuestra vida, es lo que nos ayuda a crecer conscientemente en el camino espiritual. 

Y hoy en día nos enfocamos particularmente, específicamente, en cómo lograr la felicidad, primero debemos de preguntarnos ¿Qué es la felicidad? ¿Cómo se logra la felicidad? ¿Cuáles son las causas principales de la felicidad? ¿Qué estrategias o qué prácticas de yoga espirituales podemos desarrollar para tener una felicidad pura y sostenible?

Todos queremos ser felices, eso lo tenemos en común, todos los seres humanos quieren, anhelan la felicidad, cada quien tiene diferentes estrategias para lograrlo, pero lo que compartimos es el deseo primario de ser felices y alejarnos del malestar, dolor y sufrimiento. 

Entonces…

¿Qué podemos lograr allá afuera para que la felicidad en esta vida sea una garantía?

La garantía de la felicidad es el mérito, mérito quiere decir el  "karma positivo".  Entonces, si hay mérito, independientemente del poder o influencia, independientemente del poder adquisitivo, independientemente del poder de tu inteligencia, tienes el poder del karma, que es realmente el karma positivo y es la causa directa de la felicidad, lo único que garantiza la felicidad.

Y cómo generamos mérito en la meditación? y ¿Cómo generar felicidad en la meditación?

Pero primero deberíamos preguntarnos algo más primario, todos queremos ser felices, pero ¿por qué? siempre hay un por qué. Tenemos que sospechar que dentro de nosotros hay fuego, entonces si todos nosotros anhelamos la felicidad, dentro de nosotros tiene que haber algo que ya brota, gozo, dicha, paz, bienestar, por que si no, no buscaríamos esa felicidad, hasta un maestro  dijo a “Cuando tu te enfadas, más que enfado, cuando tu estas rabioso o rabiosa y quieres que alguien que te hizo daño también sufra o se tropiece, eso demuestra que dentro de ti hay chispa divina, como es así? bueno si tu identificas al otro como tu enemigo, y si tu quieres que esa persona sufra, estas simultáneamente diciendo que el sufrimiento es malo, que tu prefieres la felicidad” pero queremos descubrir que al fin y al cabo, todo tiene su mismo origen, la misma fuente.

Entonces esta chispa divina, realmente estamos hablando del estado natural de nuestra conciencia, todos nosotros tenemos un estado primario de nuestra conciencia, entonces cuando decimos chispa divina no es nada mágico, es lo más simple que hay en el universo, lo que está por encima de esta esencia, de este estado puro. Entonces esta naturaleza este estado puro de la conciencia, que a nivel muy profundo es claridad y vacuidad, osea la lucidez de la conciencia y su estado infinito. Eso lo tenemos y está cubierto de conceptos, cubierto de emociones, de falsas identidades de mascaras y demas, pero está ahí, y aunque no lo sabemos no lo reconocemos, lo intuimos que nosotros somos esa luz, ese amor infinito, que no tiene límites que abarca todo y queremos anhelamos regresar, a ese estado de abundancia, a ese estado infinito, de paz y dicha, todos lo tenemos, entonces todos tenemos este estado muy puro dentro de nosotros.

Ahora para comprender cómo practicar, tenemos que tener el mapa, entonces esta conciencia pura, que ahora está escondida oculta dentro de nosotros en realidad se puede ver en tres perspectivas: La conciencia base, la conciencia que está despertado conscientemente evolucionando, creciendo desarrollándose en el camino espiritual y esa conciencia base que se ha autoreconocido que es lo que se le llama la “Iluminación”, entonces la misma conciencia existe en tres dimensiones:

  • En una está escondida, oculta adormecida, sucia con todo tipo de toxinas, temporarias pero no puedes ver a través de ella.

  • Después hay un proceso de depuración, de purificación

  • Después está el estado perfecto,

Entonces para ilustrar este punto entendemos que la misma naturaleza toma diferentes formas y tiene diferentes utilidades, si nuestra conciencia está sucia, llena de toxinas, adormecida nos disgusta verla, la ponemos lejos, por más que intentemos limpiarla te da cierto disgusto verla, por que aun nos identificamos con lo que teníamos, con lo que éramos, no vemos la naturaleza, vemos solo la forma, no vemos la esencia, solo vemos la forma. Entonces nosotros los seres somos esa naturaleza, esa conciencia pura que tiene tres formas, una forma que está llena de basura, otra forma que está siendo utilizada para reverencia/para prácticas espirituales, y la última forma que brilla, que es inspiración para todos los seres.

En realidad debemos reconocer nuestra naturaleza, debemos descubrir ese estado puro, y no atraparnos ni engañarnos por las formas.

Eso nos da una pista enorme de que es finalmente desarrollo espiritual, de que es finalmente meditación, hay dos perspectivas muy simples una es constructiva y otra es destructiva.

En una vamos desmontando el mito del ego quitando todo lo que estorba, todo lo que no es, todas las toxinas, quitando todas las capas, para que quede solo la esencia y de la otra manera estamos construyendo, estamos evolucionando, estamos desarrollandonos, aumentando nuestro nivel de sabiduría, nuestro nivel de amor, nuestro nivel de enfoque. Es muy importante, que podamos reconciliar estas dos perspectivas por qué estamos hablando de lo mismo, cuando nosotros elevamos nuestro nivel de amor, cuando elevamos nuestro nivel meditativo, cuando aumenta nuestra comprensión, en realidad lo que estamos haciendo es acercándonos a lo que ya está adentro, para poder reconocerlo, para poder dar el salto a experimentar esa esencia, por que ahora no lo creemos, creemos que somos corruptos, traviesos, que somos malvados, que no sabemos, que no podemos.

La meditación, por un lado, desarrolla habilidades, virtudes, y capacidades mentales, afectivas y cognitivas; pero, por otro lado, en realidad solo queremos neutralizar todas las distorsiones.

Conscientemente mejoramos estas cualidades para neutralizar todas las capas que están obstruyendo nuestra naturaleza, el cielo está aquí y ahora, solo que no lo podemos ver, no estamos conscientes de la verdad pura; estamos viéndolo a través de filtros conceptuales y emocionales que distorsionan esa realidad.

Entonces la meditación es un proceso de eliminar esos filtros, quitándolo o generando otro filtro que neutralice ese filtro.

Lo que queremos es quitar todas las toxinas, y descubrir la paz, la dicha que ya está dentro de nosotros, y hasta que no estemos aquí, hasta que no estemos en armonía con nuestra verdadera naturaleza, no vamos a estar del todo satisfechos, no importa si tienes, la pareja perfecta, la carrera perfecta, la salud perfecta, el lugar perfecto, la comida perfecta, aunque todo esté perfecto haya afuera del mundo, si tu no estás alineado en armonía con esa verdad va haber un desajuste, va haber una incomodidad, va haber un vacío existencial, mayor o menor pero va a estar ahí. 

Entonces teniendo esa perspectiva, esa comprensión y esa base, ahora vamos a hablar de cómo meditar. Una de las técnicas deconstructivas que usamos para desmantelar, en vez de construir. El mantra, la práctica del mantra, en muchas ocasiones utilizamos la respiración  para enfocar la mente, para tranquilizarla, lograr equilibrio. Y ahora me gustaría hablar del  mantra cómo el enfoque de nuestra práctica meditativa. El mantra es muy ventajoso, tiene mucho poder para  anclar nuestra atención. Mantra quiere decir man= mente tra= protección 

Mientras atendemos el mantra nuestra mente está protegida por ese mantra. Mantra es una frase en sánscrito,los mantras retienen la expresión original por que no es tan importante el significado, si no la vibración. Ese sonido, esa vibración está bendecida, entonces al nosotros estar adoptando esa vibración ese sonido, estamos desarrollando, esa cualidad, despertando o activando esa naturaleza dentro de nosotros.

Cuando sujetas o expones, tu ser a un vibración que nos agita, para que todo lo que no es original, puro, primario, se caiga. El mantra tiene una resonancia, está en armonía con esta naturaleza primaria y todo lo que no coincide con eso se va quebrando, se va desmantelando, se va cayendo.  Entonces cuando nosotros recitamos el mantra, tenemos que favorecer ese proceso, ósea nosotros nos mantenemos en esa vibración  y dejamos todo lo que no coincida, que se caiga, si viene un ruido que se caiga por su propio peso, si viene la idea de que estoy meditando que se caiga por su propio peso, todo, no queremos ideas, conceptos, imágenes, queremos regresar a la pura realidad, queremos regresar a nuestra esencia.

Entonces es una manera de operar más simple que la cotidiana, y algunas veces las cosas simples nos cuestan más, porque ahora somos personas complejas, complicadas. Tenemos que aprender a operar en un nivel muy simple, muy primario. Y para muchos nos da hasta miedo el soltar, soltar la máscaras, soltar la identificación con el cuerpo, soltar, soltar la noción de espacio, soltar la noción de tiempo, soltar la noción de ser un individuo atrapado en carne y hueso. En meditación permítete ser tu verdadero ser, sin la necesidad de anclas, de identificarnos con las cosas, deja que todo por si solo se desvanezca, que se derrumbe. Y es un poco aterrador si lo hacemos honestamente. Por que vas a acercándote a una luz, sientes más amor, más paz, pero lo curioso es que a medida de que nos vamos acercando a esa luz es demasiado amor, demasiada paz, demasiada luz, da miedo, cuando no sabes que es  arriba, que es abajo, ¿Donde estoy? ¿Dónde empiezo? ¿En dónde acabo? Entonces parte de la meditación es recuperar esa verdadera esencia. Y tenemos ciertas inquietudes en la medida que estemos aferrados, atados, a nuestra identidad, esto curiosamente nos dice que el desarrollo espiritual es de otra perspectiva una evolución de identidad, entonces si alguien te pregunta ¿Quien eres? ¿Qué es lo primero que viene a tu mente? Tu nombre, tu apellido, tu género, tu raza, tu especie ¿Quien eres? Entonces vamos a descubrir que hay capas de identidades, tenemos muchas máscaras, nos identificamos con muchas cosas y eso no es malo, es malo en la medida que esas identidades nos atrapan, malo en la medida que nos limitan, malo en la medida que no nos permiten identificarnos con la conciencia base.

El desarrollo espiritual no es necesariamente soltar o romper o quebrar la identidad, Si no, es liberarnos de su dominio y ver esas identidades cómo papeles, roles, que desarrolla nuestra chispa divina, la conciencia, entonces la meditación poco a poco nos va dando la claridad, la confianza en el amor, la sabiduría para crecer para extendernos.

Yo soy otro tu.